Una de las grandes start-ups de scooters eléctricas en España, Ray Motors, cerró sus puertas, pero logró encontrar una segunda vida… gracias a la también española Rieju.
Los activos del scooter insignia, que es el Ray 7.7, fueron comprados por Rieju. Según Solo Moto, esto incluye patentes, maquinaria, materiales y las unidades producidas que aún estaban en la fábrica.
De esta manera, Rieju añade un modelo a su gama eléctrica, que incluye las E-City, E-Tango y Nuuk. El Ray 7.7 será producido en las instalaciones del fabricante en Figueres, una vez finalizado el proceso de desmantelamiento de la fábrica de Ray Motors.
El Ray 7.7 alcanza una velocidad de 125 km/h, gracias a un motor de 11 kW de potencia, tiene frenado regenerativo, cuatro modos de conducción y está apto para conductores con licencia de conducir A1 o B. La batería tiene una capacidad de 7,7 kWh y se recarga rápidamente en 2m35s.