Después de una serie de actuaciones inconsistentes, la sensación del golf noruego, Viktor Hovland, está mostrando signos de un regreso. A pesar de no haber superado el corte en cuatro de sus últimos cinco torneos del PGA Tour, el rendimiento reciente de Hovland en el Valspar Championship sugiere un prometedor retorno a su forma.
El jugador de 27 años, que ha visto una caída significativa en su Clasificación Oficial del Golf Mundial (OWGR), está lejos de desanimarse. En cambio, ve esto como una oportunidad para revisar sus estrategias, afinar su juego y reavivar su pasión por el deporte. Es un desafío complicado, pero su determinación es inquebrantable.
La resiliencia de Hovland fue visible en el Valspar Championship. Anotó rondas de 70 y 67, lo que lo llevó a 5 bajo par. Después de la segunda ronda, se abrió sobre sus decepciones anteriores, pero se mantuvo optimista, viendo cada día como una nueva oportunidad para perfeccionar sus habilidades y mejorar su juego.
En una interacción sincera con los reporteros, como informó Golf Magic, Hovland admitió: «Sí, es una ****.» Pero se mantuvo pragmático, reconociendo que la capacidad de ofrecer actuaciones de primera calidad de manera consistente a veces puede ser tomada por sentado. Como jugador, es fácil despertarse cada día, colocarse sobre la bola y simplemente esperar la perfección. Cuando los resultados no coinciden con las expectativas, puede ser una píldora difícil de tragar.
Sin embargo, Hovland ve el lado positivo en estas situaciones desafiantes. La frustración de un rendimiento repetido por debajo de lo esperado, cree, puede llevar a una valiosa introspección y crecimiento. «Entonces, cuando comienza a no hacerlo, es bastante frustrante. Empiezas a pensar en cosas que nunca has pensado antes, y este juego se vuelve infinitamente más desafiante y ya es realmente desafiante», dijo.
Estas experiencias humildes, según Hovland, pueden llevar a lecciones valiosas. Tiene la esperanza de que su nueva perspectiva y resiliencia lo ayuden a manejar los desafíos futuros de manera más efectiva.Hovland a menudo ha sido autocrítico, un rasgo que él cree que ha contribuido significativamente a su éxito. Él dice: «Soy duro conmigo mismo, sí, pero eso también es por lo que soy bueno. Si no fuera duro conmigo mismo, probablemente no estaría aquí.» Esta incesante autoexigencia y búsqueda de la perfección siguen siendo parte integral de su enfoque, y no tiene planes de cambiar eso. Se mantiene confiado en su potencial para regresar a la cima del mundo del golf, un testimonio de su inquebrantable creencia en sus habilidades.