En una deslumbrante exhibición de compostura y precisión, Jannik Sinner defendió su título del Abierto de Australia con una victoria de 6-3, 7-6(4), 6-3 sobre Alexander Zverev en la final del domingo. El número 1 del mundo demostró por qué es el rey indiscutido del tenis en este momento, extendiendo su dominio con victorias consecutivas en torneos importantes tras su triunfo en el Abierto de EE. UU. 2024.
El tercer título de Grand Slam de Sinner y su segunda victoria consecutiva en Melbourne subrayan su extraordinaria forma, ya que ahora cuenta con 21 victorias consecutivas y 14 triunfos seguidos en eventos de Grand Slam. Aunque Zverev, clasificado como el número 2 del mundo, tuvo sus oportunidades, una vez más se quedó corto en su búsqueda de un primer título de Grand Slam.
La Mentalidad de Campeón de Sinner Brilla
El maestro italiano marcó el tono desde el principio, capitalizando las luchas de Zverev con errores poco característicos y problemas con la raqueta en el primer set. El juego impecable de Sinner en la red y su notable volea de revés sellaron el primer set, dejando poco margen de duda sobre sus intenciones.
Sin embargo, el segundo set fue donde se desarrolló el drama. Zverev mostró destellos de brillantez, pero no logró capitalizar varios momentos clave. Sinner, sujetándose el isquiotibial en un momento, mantuvo la calma bajo presión. A pesar de salvar puntos de quiebre y forzar un desempate, las frustraciones de Zverev explotaron, culminando en un golpe de raqueta. Sinner se mantuvo imperturbable, sellando el set con un toque de fortuna y un enfoque inquebrantable.
“Tuve que mantenerme fuerte mentalmente,” dijo Sinner después del partido. “Contra un jugador como Sascha [Zverev], no puedes permitirte bajar la guardia. Estoy orgulloso de cómo manejé los momentos clave.”
Oportunidades Perdidas de Zverev
Para Zverev, esta derrota será difícil de digerir. Las dificultades del estrella alemán en el voleo y su incapacidad para convertir oportunidades de quiebre cruciales definieron su desempeño. A pesar de destellos de brillantez, particularmente en el segundo set, Zverev no pudo superar la consistencia implacable de Sinner.
La frustración del número 2 del mundo era evidente, ya que no logró romper el servicio de Sinner ni una sola vez. Su incapacidad para rendir en los momentos decisivos destacó la brecha entre él y su rival en el escenario más grande.
El Set Final: El Golpe Decisivo de Sinner
El tercer set epitomizó la mentalidad de campeón de Sinner. Después de un agotador segundo set, rompió a Zverev temprano para tomar una ventaja contundente de 4-2. Aunque Zverev intentó una remontada tardía, los potentes servicios y los precisos golpes de fondo de Sinner resultaron demasiado.
Zverev mantuvo su servicio para retrasar lo inevitable, pero Sinner sirvió con calma para cerrar el partido, mostrando la compostura y precisión de un jugador destinado a la grandeza.
Un Triunfo Histórico
Con esta victoria, Sinner no solo retiene su corona del Abierto de Australia, sino que también solidifica su posición en la cima del tenis masculino. Su racha de 23 sets consecutivos ganados contra oponentes del Top 10 es un nuevo récord, enfatizando aún más su dominio sin igual.
“Ganar aquí de nuevo se siente increíble,” dijo Sinner, sosteniendo la Copa del Desafío Norman Brookes. “La atmósfera, los aficionados, la energía—esto es lo que sueñas como jugador.”
¿Qué Sigue para Sinner y Zverev?
Mientras Sinner celebra otro hito en su carrera, Zverev se queda reflexionando sobre su sequía en los Grand Slams. La consistencia del alemán lo ha mantenido en la cima del ranking, pero el esquivo título mayor sigue fuera de su alcance.
Para Sinner, la atención ahora se centra en la temporada de tierra batida, donde espera continuar su increíble racha. Con su ética de trabajo implacable y una fuerza mental inigualable, el jugador de 23 años es sin duda el rival a vencer en 2025.