No siempre tenemos que complicar lo que es simple, y esta es una norma que podemos aplicar muchas veces cuando andamos en scooter. El Joyride 300 es el scooter de más de 125 cc más accesible de SYM, pero ¿perderá en muchos aspectos frente al resto de la gama y a la competencia? ¡Es hora de intentar descubrirlo!
Por lo tanto, esta es una scooter muy fácil y práctica, como deben ser todas las automáticas. De hecho, SYM es una marca de Taiwán conocida por su relación calidad-precio, por lo que este modelo tiene un precio de venta al público similar al de varias motos de 125 cc. Desde que entró en nuestro mercado, SYM ha ganado muchos nuevos usuarios en el mundo de las dos ruedas, principalmente con sus scooters de baja cilindrada, bien equipadas y asequibles. La GTS 125 se vendió como pan caliente, pero hoy en día la marca ofrece muchas propuestas para todos los gustos y bolsillos.
Por encima de los 125 cc, este Joyride 300 es el automático más barato o menos premium, pero eso no significa que sea menos interesante. En cuanto a la motorización, está equipado con un motor monocilíndrico refrigerado por líquido que produce 25,8 caballos de potencia. No parece mucho, pero los 10 caballos de potencia adicionales en comparación con las motos de 125 cc más potentes del mercado hacen toda la diferencia al arrancar y al adelantar.
FACILIDAD
Una de las particularidades de este scooter es el hecho de tener un suelo plano en la zona de los pies. Esto ayuda mucho al subir y bajar del vehículo, y también permite colocar una mochila o bolsa junto a las piernas, lo que no siempre es posible en un scooter. Solo falta un gancho de soporte en esta zona. Debajo del asiento hay suficiente espacio, ya que podemos guardar un casco integral y aún queda mucho espacio libre.
En cuanto a las prestaciones, el motor presenta las características tradicionales en el segmento, lo mismo ocurre con la parte ciclo, donde encontramos una horquilla convencional en la parte delantera, con la particularidad de estar cubierta por fuelles de goma. En la parte trasera encontramos un doble amortiguador con regulación en la precarga del muelle y hay un freno de disco en cada eje, con ruedas de 15 y 14 pulgadas, delante y detrás respectivamente.
El frenado cumple bien su función en términos de potencia y sensibilidad de las manetas, aunque estas no tienen regulación y quedan ligeramente alejadas de las manos, lo que puede dificultar a los menos experimentados o aquellos que simplemente tienen manos más pequeñas. El asiento está colocado en una posición accesible y la posición de conducción es buena, en un conjunto estrecho y con buena protección aerodinámica, donde solo los hombros quedan algo expuestos al viento. En cuanto al pasajero, viaja de forma cómoda, gracias a un buen asiento y una buena posición de las piernas.
LO MEJOR Espacio para las piernas, precio, aceleraciones A MEJORAR Amortiguadores en mal pavimento, estética
En cuanto al equipamiento, cabe mencionar que la ignición es sin llave y funciona bien, la iluminación es completamente LED y el parabrisas delantero es ajustable con herramienta. También encontramos un puerto USB y el tablero de instrumentos es atractivo pero bastante simple, sin computadora de a bordo. La simplicidad es casi siempre la consigna en esta scooter, incluso en términos de construcción y acabados.
COMPORTAMIENTO DINÁMICO
Dinámicamente, todo funciona bastante bien en esta SYM. Como ya hemos mencionado, es una scooter muy práctica de utilizar, y el hecho de tener una plataforma plana para los pies beneficiará incluso al público femenino que desee conducir con falda o vestido. El motor ofrece aceleraciones bastante fuertes, con ligeras vibraciones al arrancar que luego desaparecen, y solo a partir de los 100 km/h se nota que el motor responde de manera menos enérgica, asegurando aún así una velocidad máxima de alrededor de 140 km/h, o un poco más en pendiente.
Los consumos promedio, medidos en la bomba de combustible (ya que la Joyride no tiene computadora de a bordo), rondaron los 3,6 litros cada 100 km, y en términos dinámicos, las únicas quejas van para el comportamiento de los amortiguadores traseros en mal pavimento, lo que hace que la scooter sea bastante saltarina. En asfalto en buen estado, todo funciona bien, y el hecho de tener una plataforma plana para los pies no resta estabilidad al conjunto, con una buena rigidez y neumáticos CST que, al menos en seco, ofrecen un buen agarre.
Los faros delanteros y traseros, con tecnología LED, son bonitos y garantizan una buena iluminación, y si bien es cierto que estéticamente esta Joyride no es apasionante, en la práctica es una buena scooter y tiene todas las características que nos gusta apreciar en un vehículo de este segmento.
Con un precio de 125 cc y cinco años de garantía, esta Joyride 300 no es una scooter premium pero presenta buena calidad y su dinámica no decepciona. Es una scooter bien ajustada para aquellos que buscan un vehículo muy práctico y accesible, y con su rendimiento ya permite realizar algunos paseos los fines de semana.
SYM JOYRIDE 300
MOTOR monocilíndrico, refrigeración líquida
CILINDRADA 278,3 cc
POTENCIA 25,84 cv (19 Kw) @ 8.000 rpm
PAREJA n.d.
CAJA automática CVT
MARCO tubular de acero
DEPÓSITO 11,5 litros
SUSPENSIÓN DELANTERA horquilla telescópica convencional, recorrido n.d.
SUSPENSIÓN TRASERA doble amortiguador, recorrido n.d.
FRENO DELANTERO disco de 260 mm, ABS
FRENO TRASERO disco de 240 mm, ABS
NEUMÁTICO DELANTERO 120/70-15
NEUMÁTICO TRASERO 140/70-14
DISTANCIA ENTRE EJES n.d.
ALTURA DEL ASIENTO n.d.
PESO 192 kg
P.V.P. (desde) 5.299 €