¿Ha perdido el campo Champion en el PGA National su atractivo? Los entusiastas del golf están levantando cejas y expresando sus preocupaciones tras el reciente paso del PGA Tour por Florida. Esta parte del tour es conocida por sus cuatro eventos consecutivos en la zona horaria del Este, todos los cuales están clasificados entre los nueve sitios más desafiantes. El campo Champion del PGA National, en particular, ha sido un formidable lugar no mayor en el tour durante la última década, con un promedio de puntuación de 71.41 (+1.41 sobre el par). Sin embargo, eventos recientes sugieren que este campo, que alguna vez fue traicionero, ha perdido su mordida, incitando quejas tanto de jugadores como de espectadores.
El campo Champion, construido por Tom y George Fazio en 1981 y rediseñado por Jack Nicklaus en 2014, ha sido durante mucho tiempo un faro de excelencia golfística. Sus días de gloria incluyen la celebración del PGA Championship de 1987 y la Ryder Cup de 1983, y su diseño riguroso, que presenta la legendaria «Bear Trap» (hoyos 15, 16 y 17), ha puesto a prueba incluso a los golfistas más experimentados. Sin embargo, los cambios recientes en el campo han suscitado controversia.
En un intento por modernizarse, se introdujo un acre adicional de césped en la calle en 2023, y el hoyo 10 se extendió 20 yardas a 550 en 2025. ¿El resultado? Un campo aparentemente menos desafiante que ha perdido su singularidad. La «Bear Trap» ahora parece menos formidable, y en un torneo reciente, solo 4 de 72 jugadores anotaron sobre el par. Esto es una clara desviación de la reputación del campo como un lugar exigente.
La comunidad golfística no ha escatimado en expresar su decepción. El golfista profesional Joel Dahmen recurrió a Twitter para expresar su nostalgia por el antiguo PGA National, reflejando un sentimiento creciente entre los jugadores por un regreso a las condiciones desafiantes que una vez definieron el torneo. El tuit de Dahmen plantea la pregunta: ¿han diluido los administradores del campo el desafío para acomodar a los jugadores con puntuaciones más bajas?Las preocupaciones van más allá de los jugadores. Los interesados y los espectadores también están perturbados por los cambios. El periodista Daniel Rapaport destacó la gravedad de la situación, tuiteando sobre el inusualmente bajo número de jugadores que anotan sobre par. Los aficionados, también, lamentan la pérdida del carácter distintivo del torneo, con uno afirmando: «La gestión del campeonato en el tour arruinó completamente este evento.»
La crítica no termina ahí. Algunos se preocupan por las implicaciones más amplias para el PGA Tour, con un comentario que compara la transformación del campo con la degradación de una instalación de campeonato a un campo municipal. Otros cuestionan el impacto en la competencia misma, sugiriendo que el campo ahora favorece las habilidades de putting sobre un conjunto diverso de habilidades.
Daniel Berger, uno de los competidores del torneo, notó el cambio en la competitividad, afirmando: «Pensé que jugué bien, pero luego alguien hizo 59. Claramente, el campo no era el viejo Bear Trap al que estamos acostumbrados. Pero aún así, un gran comienzo para el evento…»
A medida que continúan las discusiones, el futuro del Champion Course de PGA National pende de un hilo. Todos los ojos están ahora en la comunidad golfística mientras sopesan la rica historia del campo frente al paisaje en evolución del juego.