Honda ha recurrido a Kalex para trabajar en su brazo oscilante de MotoGP, y ahora es Yamaha la que ha recurrido a una empresa más conocida por el automovilismo: en este caso Dallara, en una colaboración a nivel de aerodinámica.
El fabricante italiano ya ha utilizado piezas de esta colaboración en la prueba de la semana pasada en Jerez, presentando una YZR-M1 muy diferente y, aparentemente, mejorada.
Este es otro paso en los significativos esfuerzos que Yamaha está haciendo para volver a los buenos resultados. Ha habido muchos cambios en los últimos meses, incluso a nivel de recursos humanos, con un refuerzo en la inversión y una nueva mentalidad más europea.
También hubo un nuevo chasis en la prueba de Jerez. Por ahora, uno de los pilotos de Yamaha, Álex Rins, dijo citado por MOW Mag que esperaba más: ‘Quizás esperaba más debido al aspecto diferente de la moto, incluso un mejor rendimiento. La estética puede engañar un poco’.
Aun así, el español tiene motivos para estar alentado, aunque sabe que los rivales todavía están lejos: ‘Comparando con nuestras motos rivales, tuvimos dificultades cuando estábamos en el ángulo máximo. Parece que en las curvas rápidas todos están muy lejos de nosotros. También di muchas vueltas con el nuevo chasis: la idea era encontrar más velocidad en las curvas, pero no sentí la diferencia que esperaba. Sin embargo, junto con la aerodinámica, hubo otros aspectos muy positivos, como la nueva electrónica, que creo que nos hizo dar un paso significativo hacia adelante’.
