Marc Márquez fue el mayor rival de Francesco Bagnaia en la carrera del GP de Tailandia de MotoGP, realizada en condiciones de lluvia. Sin embargo, terminó alejándose de la lucha por el triunfo prematuramente debido a una caída.
A 13 vueltas del final, el español de Gresini Racing perdió el control de su moto y no pudo evitar la caída, quedando la sensación de que podría haberlo logrado si no hubiera pisado el piano ya descontrolado.
Fue un incidente menor, que permitió a Márquez continuar en la carrera, a pesar de estar muy retrasado (finalizó en la 11.ª posición).
Este fue un momento importante de la carrera en Buriram, ya que a partir de ahí Bagnaia mantuvo siempre un margen cómodo sobre el segundo clasificado, que pasó a ser Jorge Martín (Prima Pramac/Ducati).