La temporada de MotoGP ya lleva 14 rondas, pero Marc Márquez aún no está totalmente adaptado a la Ducati – lo que acaba siendo natural, ya que compite por primera vez con una moto diferente después de diez años con la Honda RC213V.
El español de Gresini admitió que tiene dificultades particulares con el neumático cuando este aún es nuevo: ‘Me siento incómodo con el neumático nuevo, durante toda la temporada. Cuando el neumático tiene seis/siete vueltas, en algunas curvas soy más rápido que con el neumático nuevo. Por eso es ahí donde necesito entender por qué, dónde necesitamos probar algunas cosas’.
Durante el GP de Emilia-Romaña, Márquez aprovechó para trabajar en este aspecto, en el que la alta adherencia no transmite mejores sensaciones como sería de esperar: ‘En este GP comenzamos a probar pequeñas cosas en la electrónica para intentar entender para mi estilo de pilotaje. Es cierto que me estoy sintiendo incómodo con esa fantástica adherencia en la parte trasera – a la que no he estado acostumbrado toda mi carrera’.
Para el ocho veces campeón del mundo, es un gran cambio en la forma de abordar: ‘La forma de atacar el cronómetro toda mi carrera, mi concepto, fue completamente diferente con otra moto. Y este es el aspecto más difícil de cambiar’, comentó.