Royal Enfield tiene una nueva marca dedicada a las motos eléctricas. Nace la Flying Flea, en lo que es un hito en la historia del popular fabricante fundado hace 123 años.
La inspiración proviene de la moto Flying Flea de los años 1940, concebida específicamente para los militares durante la Segunda Guerra Mundial, que podía ser lanzada en paracaídas debido a su bajo peso y tenía buenas capacidades todoterreno. Luego, también fue “adoptada” por los civiles.
Y es la agilidad, ligereza y adaptabilidad de la Flying Flea lo que ahora está en la base de la nueva marca Flying Flea y de sus motos eléctricas que llegarán pronto. Los primeros dos modelos se lanzarán esta semana en la EICMA en Milán.
Estos serán la clásica FF-C6 y la scrambler FF-S6. Ambas están inspiradas en la Flying Flea original, pero con una interpretación moderna de estética sofisticada, recibiendo también tecnología de vanguardia.