Marc Márquez pasó por un período muy complicado en su carrera en MotoGP a partir del GP de España de 2020. Una lesión grave en el brazo derecho fue solo el inicio de una miríada de problemas.
Más tarde, el español sufrió otra caída aparatosa que lo dejó con un problema que en el pasado había puesto su carrera en riesgo – diplopía. Después de algunos signos de recuperación, los contratiempos no cesaron.
Ya recuperado de los problemas físicos, Márquez se encontró luego con otro obstáculo para regresar a la cima – la escasa competitividad de Honda, sin fin a la vista.
En una conversación con el canal de YouTube de Audi España, el ocho veces campeón del mundo no ocultó que el fin de su carrera fue una posibilidad: ‘Pensé en ello, pero no puedes tomar ninguna decisión en caliente‘.
Lo cierto es que, a pesar de los problemas físicos, Márquez siempre mantuvo el deseo de la adrenalina de las carreras, como relató: ‘Cada vez que salía de una lesión, tenía ganas de subir a la moto, no imaginaba una vida sin motos, sin adrenalina‘.