En 2019, Jorge Lorenzo se unió a Repsol Honda en MotoGP, siendo este el tercer equipo de su carrera después de Yamaha y Ducati. Sin embargo, al final del año decidió poner fin a su carrera.
Era un desenlace que no se preveía a principios de 2019, pero que ocurrió debido a las lesiones sufridas en una caída durante el GP de los Países Bajos. Y ese accidente fue crucial para que el tricampeón del mundo optara por retirarse.
Fue lo que reveló en una entrevista a MotoRevue: ‘Probablemente me retiré demasiado pronto debido a mi lesión en la espalda. Sin esa caída en Assen ese año, seguramente habría podido hacer dos o tres temporadas más. Pero, bueno… me retiré a los 32 años, comencé mi carrera en los Grandes Premios a los 15. Ya han pasado 18 temporadas, no está tan mal. Lo más importante es que, aunque me hice bastante daño, ninguna de mis lesiones puso en peligro mi vida’.
En la temporada de 2019, la Honda RC213V era fuerte en manos de Marc Márquez, pero no tanto con otros pilotos. Sin embargo, Lorenzo aseguró que no fue por una cuestión de rendimiento que decidió salir de MotoGP:
– No me retiré por el rendimiento de Honda. Insisto, fue por la lesión en la espalda. Sin eso, habría continuado mi carrera, probablemente con una Ducati o una Yamaha. De hecho, fueron estas dos vértebras fracturadas las que me hicieron pensar y me llevaron a parar. Ya había caído en Barcelona, durante el día de pruebas después del Gran Premio, luego hubo esta caída en Assen… fue demasiado.