Mientras Toprak Razgatlioglu luchaba por el título en Yamaha, BMW era un constructor modesto en el Mundial de Superbike hasta 2023 – año en el que el equipo de fábrica terminó en noveno, incluso detrás del equipo secundario, Bonovo Action.
Ninguna de las M 1000 RR subió al podio en todo el año pasado, algo que empeoró en comparación con 2022. Por eso mismo, había escepticismo en torno a la decisión de Razgatlioglu de mudarse a ROKiT BMW este año.
Pero pronto el turco respondió con actuaciones y resultados, mostrándose apto para luchar por victorias y podios desde la primera carrera del año. Año que terminó con 18 triunfos (13 de ellos consecutivos).
Razgatlioglu no escondió que se trató de un título especial, al afirmar al periódico Marca: ‘Este último fue muy especial, porque nadie creía en mí y en BMW. Cuando firmé con ellos muchos decían que era el fin de mi carrera, pero alcanzamos el título’.