Miguel Oliveira ha tenido hasta el momento su mejor actuación en este campeonato del mundo de MotoGP al quedar noveno, pero en realidad, su posición podría haber sido mucho mejor si no fuera por un empujón de Marco Bezzecchi que obligó al portugués a cometer un error que le costó tres posiciones. Además, asegura que su Aprilia RS-GP no está funcionando como debería.
Al comentar su carrera de este domingo en Portimão, el piloto de Trackhouse Racing comenzó explicando lo que sucedió y que resultó en la pérdida de tres posiciones: ‘Fue un resultado aceptable. Podría haber sido un sexto lugar, pero me acerqué demasiado a [Marco] Bezzecchi en la primera curva, cuando se me acercó y me empujó hacia el lado izquierdo de la pista, frené encima del bordillo y me fui recto perdiendo tres posiciones. Hasta ese momento pude al menos luchar, hacer una buena salida y también una buena vuelta inicial, en la que adelanté a las dos Yamaha [de Fabio Quartararo y Álex Rins]. No estuvo mal’.
Cuando se le preguntó sobre si estaba evolucionando, el portugués fue claro en su respuesta: ‘Sí, estoy dando pequeños pasos hacia adelante, pasos de bebé’ [risas], pasos de bebé realmente. Me gustaría algo mejor. Las sensaciones que tengo son buenas y estoy totalmente adaptado al estilo de pilotaje de Aprilia y todo lo demás, pero la moto no está funcionando como debería y eso es bastante frustrante, pero es lo que tenemos y hay que seguir trabajando’.
El #88 ocupa actualmente el puesto 14 en el mundial con 8 puntos sumados hasta el momento.