Miguel Oliveira se despidió de Misano con el décimo lugar en la carrera de este domingo, un resultado que ‘acepta’ pero que no estuvo exento de algunas críticas y lamentos, ya que la moto no siempre tuvo un rendimiento digno y acorde con lo que era necesario hacer en pista para terminar mejor.
El portugués de Trackhouse Racing hizo así el análisis de lo que ocurrió en esta carrera en el circuito italiano, denotando cierta tristeza por el hecho de que la moto no correspondiera como él deseaba: ‘El resultado fue un poco recompensador, con certeza, décimo, ok, lo acepto, pero para ser sincero con ustedes esperaba [tener] una moto más fácil para adelantar’, comenzó por decir Oliveira, quien lamentó el ritmo superior que tenía frente a la competencia más directa, pero que ante algunas limitaciones no pudo aprovechar, sin olvidar que el neumático, sobre todo en la parte trasera de la RS-GP, tampoco ayudó:
– Después del inicio, tardé muchas vueltas en encontrar una línea para adelantar a algunos pilotos, y perdí tanto, pero tanto tiempo detrás de Miller y Di Giannantonio cuando tenía un ritmo mucho más veloz. También es verdad que no sentí que estuviera siendo lo suficientemente competitivo con el neumático trasero medio, no sé si debería haber ido con el blando en la parte trasera, pero fue una sensación extraña la que tuve con el neumático trasero.
Oliveira consideró aún ‘frustrante’ su velocidad, por debajo de lo que había presentado ayer y de la cual no sabe la origen: ‘No sé de dónde vino esa sensación extraña, pero hasta el equilibrio de la adherencia estaba bien, tomó muchas vueltas. Es bueno, de todos modos, que hayamos encontrado algo de velocidad, pero ciertamente faltó el ritmo de vueltas en el segundo 31s y ayer lo teníamos, no era fácil, pero lo teníamos, y es frustrante, con certeza’.