Honda se encuentra en una situación delicada en MotoGP, pareciendo no tener fin a la vista la crisis de resultados y falta de rendimiento. De hecho, la situación parece haber empeorado en este inicio de temporada, a pesar de los muchos cambios realizados en la moto y en la forma de trabajar.
El lunes hubo un día de pruebas oficiales en Jerez que, como es natural, fue de gran importancia para el fabricante. Los cuatro pilotos – Joan Mir, Luca Marini (Repsol Honda), Johann Zarco y Takaaki Nakagami (LCR Honda) – probaron soluciones diferentes, según el director del equipo Alberto Puig.
El español, que espera que este trabajo resulte en ‘conclusiones importantes‘, también admitió al sitio del campeonato que el efecto no será instantáneo: ‘Claro que varias cosas que encuentras no son automáticas – probablemente no las puedas usar en el próximo GP. Pero claro que puedes empezar a preparar las piezas‘.
Es indudable que Honda está lejos de los lugares destacados y de los éxitos que pretende alcanzar. Puig destacó que el compromiso, ese, no disminuye, con un trabajo arduo para mejorar:
– Es un día realmente importante y debemos ver y seguir haciendo lo que estamos haciendo – es decir, estamos trabajando mucho, Honda no está durmiendo. Estamos tratando de encontrar la solución, porque claramente aún no estamos donde queremos estar.