Después de varios años de ensayos en áreas congestionadas, la práctica de filtrado de carriles se ha convertido ahora en una realidad legal en todo el territorio francés.
El 9 de enero, se oficializó la decisión de permitir que vehículos de dos y tres ruedas puedan circular entre carriles de tránsito en condiciones específicas. El decreto fue publicado y entró en vigor al día siguiente, extendiendo la medida a todo el país, en lugar de limitarla a ciertas regiones, como ocurría durante las pruebas iniciales.
En lugar de finalizar los estudios a finales de 2024, como estaba previsto, las autoridades decidieron prolongar los análisis hasta mediados de 2025. Sin embargo, la decisión de legalizar la práctica antes de concluir los estudios muestra la confianza en las ventajas ya observadas.
A pesar de la nueva libertad, el filtrado de carriles está sujeto a reglas estrictas. Solo los vehículos con menos de un metro de ancho pueden beneficiarse de esta práctica, lo que excluye modelos más anchos, como algunas motos con sidecar.
Las condiciones para el filtrado incluyen:
- Solo se permite en autopistas con un límite mínimo de 70 km/h.
- La velocidad máxima durante la maniobra no puede superar los 50 km/h.
- El filtrado debe realizarse en los dos carriles más a la izquierda.
- No puede realizarse en carreteras en obras o con condiciones adversas, como nieve o hielo.
- Los conductores deben señalizar claramente la intención de cambiar de carril.
- En situaciones de tráfico completamente parado, la velocidad no debe exceder los 30 km/h.
- Está prohibido adelantar a otras motos en filtrado.
El incumplimiento de estas reglas puede resultar en sanciones, desde multas hasta la suspensión del permiso de conducir.
Con la aplicación de estas nuevas reglas, el filtrado de carriles promete convertirse en una práctica común en las carreteras francesas, beneficiando tanto a los motociclistas como al flujo del tráfico. ¡Un cambio bienvenido para todos los que se desplazan sobre dos ruedas!