Aleix Espargaró terminó la carrera Sprint de hoy en Mandalika en un distante 16.º lugar, muy lejos de la mejor RS-GP en pista – de Maverick Viñales – y aún más lejos del vencedor. La falta de adherencia fue notoria y dejó al piloto muy descontento, recordando que ha sido una constante toda la temporada.
El piloto de Aprilia Racing comenzó diciendo a la prensa que los problemas fueron notorios, pero estos no se quedan aquí, ya que al acelerar ha sido difícil mantenerse en la moto, razón por la cual ha caído ya algunas veces:
– No tuve adherencia durante todo el día. Fue muy malo, me costó mucho. Apenas intento acelerar, caigo. Tuve tres caídas, así que no había mucho que pudiera hacer. Estoy luchando, pero no tengo velocidad. ¿Por qué? Es una buena pregunta. Estamos probando muchas cosas, pero nada está funcionando y no tenemos adherencia en la parte trasera. Pierdo la parte trasera al entrar, por eso la moto no gira y apenas toco el acelerador, patina mucho.
Este problema le valió una comparación con lo que sucedió en Cataluña, donde ganó, pero hay diferencias, consideró: ‘Sentí que incluso en Barcelona estaba realmente al límite. Gané porque hubo un par de caídas delante de mí. Si no, no habría ganado esa carrera. Pero incluso en Barcelona, siempre volé, hice la pole position, y no pude rendir al nivel que esperaba’.
Y a pesar de la victoria, admitió, no tuvo particularmente un gran rendimiento, rematando con una nueva referencia a la falta que siente en la moto: ‘Por eso, gané, pero para ser justo, no estuve fantástico allí. Este año estoy sufriendo una gran falta de adherencia’.