Después de una década con Repsol Honda, Marc Márquez estará este año por primera vez en su carrera de MotoGP con un equipo independiente y europeo. Las diferencias son muchas y a varios niveles.
El hexacampeón de la clase reina explicó que, más que la cultura en sí, la mayor distinción es entre ser un equipo de fábrica y uno satélite, teniendo en cuenta los requisitos del trabajo:
– Más que italianos y japoneses, es ser fábrica y no ser de fábrica. En un equipo de fábrica tienes varias cosas para probar y necesitas entender el modo de pilotar, necesitas estar muy enfocado porque es necesario ser muy preciso en los comentarios ya que será el desarrollo de la moto. En este momento estoy simplemente en otra situación: me enfoco más en aprender a pilotar esta moto. Claro que la información todavía no fluye de la misma manera con los técnicos y mecánicos porque trabajé 12 años con el otro equipo. Pero claro, Honda es Honda, es la HRC, y les tengo un enorme respeto.
En cuanto a la cultura, Márquez no niega que sea muy diferente, pero considera que hay similitudes en la forma en que es necesario trabajar: ‘Es la cultura japonesa y un equipo de fábrica, y es un equipo privado, familiar, y la cultura italiana. Por lo tanto, es completamente diferente, pero al final de cuentas la forma de trabajar, la forma de ser preciso y de planificar las pruebas, si quieres luchar en la cima es una forma y es tratar de tener todo en lo mejor’.