Pol Espargaró hizo su tercer wildcard de la temporada en MotoGP el pasado fin de semana, al competir por Red Bull KTM en el GP de San Marino. Así, se colocó en un ambiente de mayor riesgo, pero también de mayor intensidad, complementando su trabajo como piloto de pruebas.
El español explicó que son contextos diferentes, a pesar de que un GP esté asociado a más presión: ‘Saben, estuvimos cuatro días probando antes del GP de Austria, y no pasó nada – todo fue sin problemas y bien. Pero luego llegamos al GP y de repente perdimos dos motos en menos de un día’.
El grado de exigencia para el piloto, la moto y el equipo en un GP es mucho más alto, siendo bueno trabajar también con esa intensidad, como mencionó Espargaró: ‘Poner la moto en un ambiente estresante significa ir detrás de otros pilotos, entrar y salir de los boxes de una manera a la que no estás acostumbrado. Poner la moto en un modo de sufrimiento durante 45 minutos no es lo mismo que ir a una prueba. Durante una prueba haces las cosas como querías, como planeaste. Y esto hace que no solo el piloto, sino también la moto y todos los componentes como el equipo, los mecánicos, todos trabajen en un espectro de intensidad diferente’.
El #44 completó: ‘Entonces es importante competir y también poner la moto en este ambiente de competición para hacerla sufrir – especialmente con esta temperatura. Hacer una carrera larga, una carrera Sprint, incluso si quieres simular en una prueba, es muy difícil’.
