Hace dos semanas, KTM AG inició el procedimiento para declararse en insolvencia, revelando una deuda gigantesca que ronda los tres mil millones de euros, junto con dos filiales. El MotoGP está, por ahora, asegurado, pero la situación preocupa a Pedro Acosta.
El empresario del piloto español habló sobre lo sucedido en el podcast Por Orejas, del sitio Motorsport.com: ‘La verdad es que no fue una noticia fácil de digerir – desde luego por las familias que se quedaron sin empleo y muchos proveedores de KTM que probablemente no podrán cobrar lo que esperaban y seguramente también tienen muchas familias. Y eso es lo más importante hoy, todo el impacto que ha tenido en la economía local’.
A pesar de que la continuidad en MotoGP está garantizada, Valera destacó que las condiciones son ahora diferentes a las anunciadas a mitad de año, cuando se firmó el contrato:
– En cuanto al proyecto de MotoGP, por suerte – por lo que nos dicen – continuará, por lo que no está en peligro que no haya una moto para el próximo año. Lo que preguntamos es en qué condiciones vamos a competir el próximo año, porque en mayo o junio firmamos un contrato con un proyecto ganador, con una empresa que generaba decenas de millones de euros de beneficios el año anterior, y con un mensaje claro de que estaban en posición de poder luchar contra el dominador actual que es Ducati.
Sin escapar a la realidad, el agente de Acosta dijo: ‘Esto, hoy, no es así. De repente, todo cambió en seis meses, y obviamente todos nos preguntamos qué sucedió. Es algo que nos preocupa, y negar lo evidente sería absurdo. Creo que hay que reconocer y ser honesto. Y obviamente, tanto a Pedro, como a mí, como a su familia y a quienes lo rodean, nos preocupa la situación actual de KTM. Y nos preguntamos qué sucedió en seis meses’.