La gama Evo de Beta está confirmada para 2024 como una de las más competitivas, atractivas y extensas en la categoría Trial, con nada menos que seis modelos diferentes capaces de satisfacer las diversas necesidades de todos los conductores. Las novedades introducidas con el modelo de 2023 son reconfirmadas, pero el impacto estético se actualiza a través de un nuevo grafismo que rompe la tradición del rojo Beta. La versión 2024 de la Evo puede, por lo tanto, ser reconocida por el grafismo original con un espíritu de carrera, pero al mismo tiempo elegante.
El rojo se utiliza para finalizar la base en gris y no como elemento principal, realzando los volúmenes de la moto. El chasis y el brazo oscilante permanecen en color aluminio para subrayar la conexión con el mundo de las carreras. La principal novedad desde el punto de vista del equipamiento técnico se refiere a la introducción de la llave electrónica que desempeña un doble papel, combinando la innovadora función antirrobo con el uso más clásico para la seguridad pasiva de la moto y del conductor, típicamente representada por el “Kill-Switch”.
El nuevo dispositivo electrónico es una patente europea exclusiva registrada por Betamotor (EP3064405B1) y cumple la función de dispositivo antirrobo y de protección de la moto y del conductor al mismo tiempo. La llave electrónica está compuesta por dos partes: una que se fija en el manillar del vehículo y otra, magnética (que el conductor puede usar con una pulsera), que puede separarse para activar el mecanismo. El dispositivo, que fue introducido recientemente por primera vez en un modelo Beta con la Xtrainer My 24, cumple la función de un dispositivo “Kill-Switch” para la seguridad de la moto y del conductor, apagando la moto cuando se desconecta el punto de contacto magnético conectado a la muñeca y al manillar del conductor.
Sin embargo, a diferencia de un “Kill-Switch” normal, la nueva llave electrónica también incorpora la función de un dispositivo antirrobo, impidiendo que el motor se encienda cuando está apagado, debido a una encriptación que asocia exclusivamente la llave a la moto, evitando el robo del vehículo cuando se deja sin vigilancia.
