Francesco Bagnaia fue el cuarto en el Entrenamiento del GP de Indonesia de MotoGP, pero la sesión estuvo lejos de ser fácil. El piloto de Ducati no encontró la forma de ser competitivo y llegar a los lugares de arriba hasta sus últimas vueltas, cuando el neumático blando nuevo hizo toda la diferencia. Hasta ese momento, la clasificación directa para la segunda fase de la calificación parecía en riesgo.
El campeón de 2022 y 2023 admitió que los fantasmas de las dificultades del año pasado en Mandalika lo atormentaron: ‘Estaba reviviendo otra vez la pesadilla del año pasado – creo que mi equipo también. Estábamos un poco bajo presión, pero afortunadamente en cuanto monté el [neumático] blando nuevo, fue otra vez fantástico’.
Sobre las dificultades experimentadas, Bagnaia explicó: ‘Simplemente perdimos algo de tiempo esta mañana, porque decidimos ir con la misma estrategia electrónica del año pasado, en la que había menos adherencia. Y no estaba acelerando a la salida de las curvas, y estaba teniendo algunas dificultades. Pero cambiamos esto, y esta tarde, no sé por qué, tuve muchas dificultades en las curvas a la derecha. Estaba perdiendo segundos con los líderes. Los dos con los mismos neumáticos que eran el [Jorge] Martín y el Enea [Bastianini] – ellos estaban haciendo 1m30,6s, yo estaba haciendo 1m31,6s/1m31,5s, y estaba teniendo algunas dificultades’.
El escenario estaba complicado, y para el italiano haber encontrado la forma de ser rápido al final fue un alivio, como admitió: ‘Todo lo que estábamos probando no estaba funcionando, así que fue una situación extraña. Tan pronto como montamos el nuevo suave, todo volvió a estar bien, me sentía bien, y esto me está ayudando mucho a sentirme mucho mejor y a estar más tranquilo. Porque, si no fuera así, sería un problema’.
