Marc Márquez dejó a Repsol Honda amigablemente al final de la temporada pasada después de cuatro años adversos para unirse a Gresini y así quedar ligado a Ducati – cuyo equipo de fábrica representará el próximo año.
Pero, después de una década en el constructor japonés y de muchos momentos (buenos y malos), quedó una relación fuerte con su anterior equipo – tanto que se tomó la molestia de ir al garaje el jueves para dar parte del mérito por la primera victoria con Gresini y con una moto de Ducati lograda en Aragón el pasado domingo.
Alberto Puig, director de equipo, afirmó en la transmisión en el sitio oficial del campeonato que hay satisfacción por el resultado de Márquez: ‘No estaba aquí el jueves cuando Marc vino, pero hablé con él. Todos estamos contentos; este chico fue parte de este equipo durante varios años, ganó varias carreras, varios campeonatos, hizo varias pole positions. Por eso, absolutamente todos en el equipo estaban bastante contentos’.
El responsable español explicó entonces esta satisfacción por el resultado de Márquez que, a todos los efectos, ahora es un adversario: ‘Porque vivimos estos momentos con él, los buenos, pero también los malos. Y hubo muchos años malos. Por lo tanto, después de esto solo puedes estar bastante contento cuando ves que finalmente un chico hace este enorme esfuerzo y regresa. Así que estoy realmente contento por él, y le deseamos lo mejor para el resto de la temporada y para el próximo año’.
