Hace unas semanas, Pol Espargaró regresó al MotoGP para el primer wildcard desde que se retiró a tiempo completo al final de la temporada pasada. El Gran Premio de Italia, en el exigente circuito de Mugello, fue la ronda seleccionada, que el piloto aceptó sin pensar en ciertos aspectos que tendrá en cuenta en el futuro.
En el podcast Por Orejas, del sitio Motorsport.com, el español de Red Bull KTM no ocultó que el desafío fue grande: ‘Fue muy duro y muy estresante, porque no fue un circuito que yo eligiera o tuviera preferencia para competir. Además, creo que la situación en la que estaba no era la ideal para pilotar en Mugello debido a la falta de velocidad que tenía. Y no estaba en la moto desde el test del lunes después del GP de Jerez. Por eso, me faltaba bastante velocidad, pero hice lo que pude y lo importante es que era para extraer información para el equipo y todo salió bien’.
Con todas las condiciones en mente, Espargaró no tenía objetivos ambiciosos, siendo lo esencial llegar al final y recoger información como explicó: ‘No competí en Mugello el año pasado porque estaba lesionado, así que las expectativas eran muy bajas. El nivel que establecimos dentro del equipo, dentro de la fábrica, era muy bajo, porque había algunos parámetros que no controlamos mucho. Por ejemplo, el tema de la moto; la moto era muy, muy diferente […], había muchos componentes nuevos y solo la había pilotado en Jerez después de la carrera. Y no sabíamos cómo todas esas cosas nuevas iban a funcionar en Mugello. Por lo tanto, como todo estaba muy en el aire, me faltaba rodaje, velocidad, las expectativas eran tan bajas que al final, el resultado estuvo bien. Fuera lo que fuera, lo que viniera era importante siempre y cuando pudiéramos terminar la carrera y recoger información, que era lo esencial’.
Y ¿cuál fue la respuesta del #44 ante la invitación a Mugello? ‘Partimos del principio de que muero de ansias por competir! Hace muy poco tiempo que no compito y realmente me da igual el lugar donde competir. Así que estaba esperando como un niño pequeño saliendo de la escuela esperando los caramelos – esperando que me dijeran cuándo y dónde competir, y yo aceptaba, me daba igual. Es evidente que después de ver cómo salió todo y a lo que te sometes al pilotar en un circuito como Mugello, el próximo año intentaré planificar las cosas de otra manera, y también se lo hice ver al equipo de pruebas, para preparar un poco más este tipo de eventos. Pero aún así, cuando me lo propusieron, obviamente no pensé en todas las condiciones: no pensé que no había pilotado en Mugello el año pasado, no pensé que iría a la moto después de un mes parado, con una moto completamente diferente a la que estoy acostumbrado’, señaló.