Joan Mir y Luca Marini son, este año, compañeros de equipo en Repsol Honda en MotoGP. Sin embargo, el futuro de ambos puede no estar ligado al constructor japonés, que actualmente atraviesa una crisis de rendimiento sin fin a la vista.
Una cosa es segura: Mir está al final de su contrato. Y, según el sitio MotoSprint, tiene la intención de no continuar, después de dos años muy frustrantes en los que aún no ha podido luchar por buenos resultados como en Suzuki. En este momento, ya habría iniciado contactos con Trackhouse Racing.
En el otro lado del garaje está Marini, que en su cuarta temporada se convirtió en piloto de fábrica. El contrato es válido hasta 2025, pero también debido a la actual situación delicada en Honda puede que no quiera continuar. Y, el sitio mencionado anteriormente, menciona rumores de que Trackhouse Racing es una posibilidad para el futuro del italiano.
De hecho, hay una figura en el equipo americano que es común, por diferentes motivos, a ambos: el jefe de equipo Davide Brivio. Fue con él que Mir trabajó en Suzuki conquistando el título en 2020. Mientras que Marini tiene la conexión porque Brivio fue un elemento clave en la carrera de su hermano, Valentino Rossi.
Actualmente, Trackhouse Racing tiene a Miguel Oliveira y Raúl Fernández como pilotos. Los contratos de ambos terminan al final de esta temporada. El equipo es satélite de Aprilia, un constructor que tiene una de las motos más fuertes en la actualidad.
