Maverick Viñales hizo historia al convertirse en el primer piloto en ganar en MotoGP con tres fabricantes diferentes y es considerado un candidato al título para esta temporada. Sin embargo, no todo fue fácil y hubo muchos altibajos hasta llegar al momento actual, con algunas certezas llegando solo al final de 2023 y, ya este año, con algunas dudas también.
El piloto de Aprilia Racing recordó los momentos en los que sintió que las “luces se encendieron” de verdad y cómo, poco después, las cosas aparentemente cambiaron drásticamente: ‘Todo cambió después del GP de Qatar, en noviembre del año pasado. En Valencia tuve la confirmación con la pole y la vuelta más rápida, pero en los tests en Malasia con la nueva moto me sentí perdido, no podía creerlo’, explicó en palabras a TNT Sports.
De hecho, esto entró aún más en la mente del español después de haber ganado tanto como ha ganado, y solo hay una cosa que aún lo motiva: el deseo de conquistar más victorias: ‘Fue difícil encontrar la motivación para seguir compitiendo después de haber ganado muchas carreras y haber ganado lo suficiente. La única razón que me mantiene aquí es el hambre de éxito y la motivación de que, comprometiéndome y explorando mi talento, puedo sacar el máximo provecho de cada moto’.
Él, que ya ha ganado con Suzuki, Yamaha y ahora con Aprilia, explicó lo crucial para hacer historia, tal como él lo hizo: ‘La experiencia ayuda. En particular, mi inicio en Suzuki, cuando, sin experiencia previa, ayudé al equipo en el desarrollo. Sé lo que una moto necesita y tengo cierta sensibilidad para juzgar lo que es bueno y lo que no lo es’.