A pesar de no haber llegado más allá del puesto 11, Miguel Oliveira tiene motivos para estar alentado después del Gran Premio de las Américas de MotoGP. Esto se debe a que vio a un piloto de Aprilia ganar – Maverick Viñales, que fue superior en varios aspectos en esta ronda.
El portugués de Trackhouse Racing considera que el rendimiento del ganador de Austin se debe en gran medida al piloto, aunque no deja de reconocer que la moto también juega un papel importante:
– Como él dijo, le encanta esta pista, siempre pilota muy bien aquí. Claro que la moto le está permitiendo hacer este tipo de cosas, pero él está en sintonía con la pista, con la moto, y cuando tienes este flujo, es muy difícil vencerte.
El resultado de Viñales sirve de motivación para Oliveira y para Trackhouse, como aseguró el #88: ‘Nos motiva, y por supuesto motiva a todos los demás a hacerlo aún mejor. No soy fan de Austin, nunca fui particularmente rápido aquí, Maverick sí. Por lo tanto, necesitamos construir a partir de aquí y ver qué podemos hacer en Jerez‘.