La base técnica es la emblemática Super Meteor 650, pero gracias a algunas pequeñas pero importantes modificaciones, la Shotgun 650 parece tener, en papel, un carácter completamente diferente.
La Royal Enfield es sinónimo de personalización, cada modelo de la gama cuenta una historia, y con la nueva Shotgun 650 el enfoque fue la personalización. Fue a partir de este ecosistema que nació la idea de experimentar y construir un prototipo, que más tarde se convertiría en realidad, de una Royal Enfield totalmente personalizable.
La Shotgun 650 nació en forma del concepto SG650, revelado en la EICMA 2021, y fue la curiosa respuesta al concepto que llevó a Royal Enfield a explorar la producción de una moto de inspiración personalizada, pero multifacética.
Como se mencionó anteriormente, la base técnica es la ya probada de la principal moto cruiser de Royal Enfield. La nueva Shotgun 650 está equipada con un motor de dos cilindros refrigerado por aire y aceite que produce 47 CV de potencia a 7.250 rpm y 52,3 Nm de par a 5.650 rpm, en perfecta línea con los requisitos de la licencia A2. La caja de cambios es de seis velocidades.
La base de la nueva Royal Enfield Shotgun 650 es un marco tubular de acero, la distancia entre ejes es de 1.465 milímetros y la altura del asiento en relación al suelo es de 795 milímetros, accesible para todas las alturas.
La Shotgun 650 está equipada con una moderna horquilla invertida Showa (Separate Function Big Piston) con 120 milímetros de recorrido, mientras que en la parte trasera hay un amortiguador doble, también Showa, con 90 milímetros de recorrido. El tanque de combustible tiene una capacidad de 13,8 litros y, gracias al bajo consumo de combustible, ofrece una autonomía respetable.
El peso indicado en la ficha técnica es de 240 kg con un 90 % de combustible y varios fluidos del motor. El peso en orden de marcha también incluye el soporte del asiento del pasajero y la estructura de apoyo dedicada (ambos removibles).