Ducati volvió a ser el constructor más fuerte en la temporada 2024 de MotoGP – solo no ganó una de las 20 carreras principales y alcanzó todos los títulos posibles.
Pero Jorge Martín fue campeón de pilotos con el equipo satélite Prima Pramac, superando al piloto de fábrica de Ducati, Francesco Bagnaia en un duelo directo que duró hasta la última carrera.
Había cierto escepticismo sobre las posibilidades de Martín – sobre todo después de que fue anunciado por Aprilia para 2025. Lo cierto es que Ducati siempre le dio las mismas condiciones que a Bagnaia, dejando que la disputa fuera puramente deportiva.
Una postura elogiada por Rúben Xaus en el podcast Dura La Vita, donde comenzó afirmando: ‘En las últimas carreras, Ducati podría haber apagado la moto, haber tenido un problema con la moto de Jorge Martín, podrían haber pasado todas esas cosas […]. Y ellos, en estas cinco o seis carreras, dieron todo en pista. Porque quisieron ese orgullo italiano de ganar en pista, pero con la impotencia de no poder ganar en pista por tener un rival más fuerte – o haber hecho mejor las cosas’.
Para el antiguo piloto, la actitud de Ducati benefició al propio MotoGP: ‘Hay que quitarse el sombrero ante el comportamiento de Ducati deportivamente, dentro de un campeonato en el que sabemos que las motos están por encima de cualquier otro deporte motorizado. Esto es lo que me gusta mucho. Para mí, fue la clave, en bien del campeonato’.