Desde que en 2019 se estrenó en MotoGP, Miguel Oliveira ha estado siempre integrado en equipos de constructores europeos – primero en KTM, tanto en Tech3 como en Red Bull KTM; y luego en Aprilia a través de RNF y Trackhouse Racing.
Ahora, en 2025 será piloto de Prima Pramac Yamaha – por lo que trabajará por primera vez con un constructor japonés, cuyas metodologías de trabajo son diferentes.
El primer contacto ocurrió esta semana en la prueba de Barcelona. Oliveira quedó con una buena primera impresión, destacando la preocupación de los ingenieros por asegurarse de que el feedback sea correcto y bien interpretado:
– Está claro que es diferente, pero es bueno porque necesitas decir las cosas de forma muy directa, y ellos verifican contigo si lo que dijiste es realmente lo que querías decir. Y esto es bueno, porque al final esa es la única cosa que tendrán para procesar además de los datos – son nuestros comentarios, y si está equivocado, todo será un caos. Entonces, fue muy bueno.