Actualmente recuperándose de la lesión sufrida en Indonesia, donde sufrió múltiples fracturas en el brazo derecho, Miguel Oliveira está altamente confiado y entusiasmado por su futuro proyecto en MotoGP, con un nuevo equipo y fabricante en los próximos dos años.
El portugués, que ha manifestado su deseo de volver a la competición lo antes posible, espera estar en Valencia en la ronda final del Mundial, con el fin de despedirse de Trackhouse Racing/Aprilia, y también para tener un primer contacto con la Yamaha M1, que pilotará con Pramac.
Oliveira estuvo presente ayer en Estoril y se mostró feliz por lo que el futuro le depara, como explicó en palabras a SportTV:
– Tengo mucha confianza en el nuevo proyecto. Creo que será, junto con el equipo de Pramac, un gran paso que voy a dar y espero que las cosas puedan desarrollarse de la mejor manera posible.
Con Pramac Racing, Oliveira tendrá su tercera experiencia con un fabricante diferente en MotoGP, después de KTM y Aprilia, uniéndose ahora a la experimentada Pramac, que dice adiós a su larga asociación con Ducati para abrazar un nuevo proyecto con Yamaha, equipo que llevaba dos años sin equipo satélite.