No clasificado hoy en el GP de Japón pero ni por eso feliz por haber sumado puntos, de hecho, todo lo contrario, Aleix Espargaró admitió que ni siquiera quiere saber la posición en la que terminó la carrera, después de haber vivido una auténtica ‘pesadilla’.
Ante la prensa, el español de Aprilia Racing no se contuvo: ‘No me interesa la posición. La distancia y diferencia con el ganador es increíble y esta fue una de las peores carreras de las últimas tres temporadas. No tenemos ninguna adherencia, es increíble. Es increíble la diferencia de adherencia. Cuando las Ducati me adelantaron, porque hice una salida muy, muy buena, pero cuando me adelantaron no había nada que pudiera hacer, estaba derrapando de todas las maneras, patinando. Fue una pesadilla’.
Ni el hecho de haber recurrido a los diferentes mapas de la moto le ayudó y acabaron teniendo un fuerte impacto desde el punto de vista físico para el #41:
– En las últimas cinco o seis vueltas empecé a tener alarmas y fui al mapa dos, luego al tres y la moto comenzó a no tener potencia justo en el mapa tres y sabía, vi al inicio de la carrera que estaba por encima del límite con la moto patinando y estoy completamente destruido físicamente porque no había adherencia y tuve que luchar mucho y luego el consumo [de los neumáticos] es más alto de lo esperado. Llegamos al final pero con media vuelta más y mi moto se paraba.