La Brixton Motorcycles tiene a su disposición la Crossfire 500, que promete redefinir el segmento de las motos de cilindrada media. Desarrollada en Europa, esta moto ha recibido elogios de la prensa especializada y parece destinada a convertirse en un clásico moderno.
El corazón de esta máquina es un motor de dos cilindros en línea de 486 cc, que produce 47,6 cv de potencia y 43 Nm de par, alcanzando el límite legal para la licencia A2. Brixton optó por un enfoque más tradicional, evitando el comando ride-by-wire en favor de una experiencia de conducción más auténtica.
La Crossfire 500 no escatima en la calidad de los componentes. Está equipada con suspensiones KYB ajustables, frenos J. Juan y neumáticos Pirelli Angel ST. El sistema de frenado incluye un disco frontal de 320 mm con pinza de cuatro pistones y un disco trasero de 240 mm.
En términos de seguridad, la moto cuenta con el sistema ABS Bosch 9.1 de dos canales, pesando solo 640 gramos. Este sistema fue calibrado específicamente para la Crossfire 500, teniendo en cuenta factores como el centro de gravedad y la circunferencia de los neumáticos.
El diseño de la moto está marcado por su icónico diseño en X y por un sistema de escape totalmente en acero inoxidable, que promete un sonido rico y profundo. La iluminación es toda en LED, incluyendo las luces diurnas de circulación.
En el panel de instrumentos, encontramos una pantalla LCD circular que proporciona toda la información esencial de forma clara y visible.
Con la Crossfire 500, Brixton parece haber logrado un equilibrio entre la tecnología moderna y la esencia del motociclismo tradicional, ofreciendo una opción atractiva para los entusiastas que buscan una moto de cilindrada media con carácter.