La compañía Yamaha Motor Company sorprendió al mercado al anunciar la implementación de un nuevo tipo de acero reciclado en los embalajes de sus motocicletas. Esta iniciativa pionera marca un paso significativo en la estrategia de la empresa japonesa hacia la neutralidad de carbono en su cadena de suministro global hasta 2050.
El nuevo material, denominado ‘acero de bajo carbono’, se produce a través de hornos eléctricos que funden chatarra de hierro proveniente de diversas fuentes, como edificios demolidos, electrodomésticos desechados y automóviles al final de su vida útil. Este proceso innovador resulta en una reducción sustancial de las emisiones de CO2 en comparación con los métodos tradicionales de producción de acero.
Yamaha se destaca como la primera empresa japonesa en utilizar láminas de acero producidas en hornos eléctricos para las estructuras de embalaje de motocicletas. La implementación está prevista para octubre de 2024, con planes de expansión gradual a otras áreas de producción.
Esta medida se enmarca en una tendencia creciente en la industria de las motocicletas, donde los fabricantes buscan alternativas sostenibles además del desarrollo de vehículos eléctricos. Suzuki, por ejemplo, ya ha utilizado fibra de carbono reciclada en la carrocería de su GSX-R1000 experimental en las 8 Horas de Suzuka, alimentado por un 40% de combustible no fósil.
La adopción de este acero reciclado por parte de Yamaha no solo demuestra el compromiso de la marca con la sostenibilidad, sino que también establece un nuevo estándar en la industria, desafiando a otros fabricantes a seguir el ejemplo en la reducción del impacto ambiental de sus procesos de producción y embalaje.