Pecco Bagnaia entró en el descanso de verano en posesión del liderato del Campeonato Mundial de MotoGP, pero como le sucede a cualquiera y a pesar de ser campeón, también comete errores y eso es exactamente lo que le sucedió en el GP de España, en la carrera Sprint, o al menos esa es la convicción del Director del Equipo Ducati Lenovo.
Davide Tardozzi no tuvo dudas en considerar lo sucedido como un error, y explicó que el italiano es perfectamente consciente de ello, aunque rápidamente se recuperó: ‘No quiero llamarlo mala suerte, él cometió errores especialmente en Barcelona y lo sabe muy bien. De todos modos, él es un campeón y dejó eso atrás: al día siguiente, como saben, no lloró, ganó’.
Según el responsable, Bagnaia es muy exigente consigo mismo y está en constante crecimiento: ‘Dicho esto, Pecco es muy duro consigo mismo cuando comete errores, y creo que en el futuro aprenderá mucho de esos mismos errores. Aún está creciendo, es dos veces campeón del mundo y está trabajando en sí mismo para resolver esas cosas que, a veces, son cuestión de concentración’.
Lo que llevó a la caída, según Tardozzi, se debió a un grave fallo… de concentración: ‘Creo que en Barcelona él estaba seguro de que ya tenía la victoria en el bolsillo, y a veces tienes que estar concentrado hasta la bandera a cuadros’.
La caída ocurrió, recordemos, en la última vuelta del GP cuando el italiano tenía todo para conquistar el triunfo.